El agua dormida de la fuente
No te prometo el cielo de tapiz francés / tampoco el farol escandinavo / al final del amor / ni siquiera la almohada de mi hombro
No te prometo el cielo de tapiz francés / tampoco el farol escandinavo / al final del amor / ni siquiera la almohada de mi hombro
Arriba / la profecía de la borrasca / Aquí / la paz de la luz / en su infarto titilante
La obra literaria podría ser, en tales casos, el grito en el lindero, justo antes de cruzar hacia donde nadie desearía hacerlo…
Ramos Sucre fue un doliente de la belleza. Su poesía es inmenso descargo de la ofendida belleza…
Cuando los pentagramas / sean calabozos de la esperanza / y el mundo / sea la portada rota de una revista / te esperaré / en un nocturno de Chopin