La coma y sus usos (parte III)
Uno de los usos más socorridos de la coma es el que le corresponde como delimitador de elementos coordinados. La coordinación consiste en la unión de dos o más elementos análogos sintácticamente: En el estante hay libros, cuadernos, lápices y borradores. Me parece que compró un té de manzanilla, un ponqué, un par de caramelos de menta y una cajetilla de cigarrillos. Quise pasar por tu casa, pero no me alcanzó el tiempo. Como se podrá notar en los ejemplos anteriores, los elementos coordinados (subrayados) pueden ser palabras, sintagmas u oraciones, en cuyos casos se aplican diversas normas que hacen algo compleja su puntuación según el tipo de coordinación y la presencia o no de conjunciones.
La coordinación puede ser copulativa cuando los elementos coordinados se suman entre sí (Le regalé mi suéter y mi gorra), disyuntiva cuando los elementos coordinados constituyen términos de una elección o alternancia (¿Vienes o te quedas?) y adversativa cuando los elementos coordinados se oponen entre sí (Me quedaré, pero hasta el mediodía). En tales casos, las conjunciones copulativas simples suelen ser y, e, ni, además de la locución copulativa así como. Las conjunciones disyuntivas simples son o, u, ni. Las conjunciones adversativas simples son pero, sino, mas (esta última, de poco uso en la actualidad).
Uso de la coma en la coordinación copulativa y disyuntiva
La coordinación copulativa puede ser yuxtapuesta o conjuntiva. En el primer caso, los elementos coordinados van delimitados por coma: Pueden asistir tú, ella, él, etc. Fregué los platos, las tazas, los vasos… Tú viniste, María fue a tu casa, yo fui a la de María. Valga acotar que las series incompletas terminan con etcétera, etc. o puntos suspensivos. En el segundo caso, la coordinación copulativa incluye el uso de un elemento conjuntivo —que une el último miembro coordinado a la serie—, el cual podría ir precedido o no de coma.
En principio, no se escribe coma antes de las conjunciones simples copulativas y disyuntivas y, e, ni, o, u cuando estas coordinan elementos de una misma serie o sintácticamente equivalentes: Traje pan, azúcar, leche y café [los elementos pertenecen a una serie homogénea con función de complemento directo]. Me calcé los zapatos, les até los cordones y los pulí [los elementos tienen el mismo sujeto implícito (yo) y pertenecen a una serie homogénea]. No le escribió en Navidad a su madre, a su tía ni a su hermana [los elementos pertenecen a una serie homogénea con función de complemento indirecto]. Sin embargo, hay casos en los que la coma antes de las conjunciones copulativas y disyuntivas simples será optativa y hasta preceptiva.
Si la primera de las oraciones coordinadas con conjunción copulativa/disyuntiva es particularmente larga, suele aconsejarse el uso de la coma antes de la conjunción, con mayor razón si tienen sujetos distintos (subrayados): El profesor le hizo una pregunta un tanto rebuscada y mal intencionada, y Juan respondió con una impertinencia. ¿Le dirás a ella lo que sientes hace tiempo, o te quedarás callado?
Si la última oración coordinada hace heterogénea (subrayada) la serie, se separa con coma: Marta adornó el arbolito de Navidad, armó el pesebre, colgó de la puerta la corona de Adviento, y pensó que hacía mucho que no era tan feliz. En este sentido, aun cuando la serie parezca homogénea, si el último elemento se constituye en otro predicado (subrayado) del mismo sujeto y semánticamente se enlaza con todo el predicado anterior, debe llevar coma antes de la conjunción copulativa/disyuntiva: Puso en su maletín de primeros auxilios una gasa, adhesivo, alcohol, y lo cerró. No sé si llamar a Pedro y a su hermano, o me quedo callado.
Suele recomendarse el uso de la coma en el polisíndeton (repetición de conjunciones copulativas o disyuntivas con valor enfático): Mi padre es fuerte, y tierno, y atento, y comprensivo. No quiero que vengas, ni que llames, ni que me mandes correos, ni nada.
En otro orden de ideas, merece especial atención la conjunción y en función adversativa (se la reconoce porque puede sustituírsela por pero), pues es aconsejable colocar coma antes: Le regalé unas rosas, y las tiró a la basura. → Le regalé unas rosas, pero las tiró a la basura.
Por último, es obligatoria la coma antes o después de las conjunciones copulativas/disyuntivas si estas van precedidas o seguidas de un inciso explicativo (subrayado): Vino el Sr. Martínez, que es ingeniero civil, y recomendó detener la obra por riesgo de que colapse. Compré el periódico y, como siempre, empecé a leerlo en seguida. ¿Vamos al cine, lo cual recomiendo, o nos regresamos a casa? Tenemos dos opciones: hablar con el jefe de una vez por todas o, como siempre, esperar a que mejore el panorama. Nótese que, en estos últimos cuatro ejemplos, desaparecería la coma si suprimiésemos el inciso.
Uso de la coma en la coordinación adversativa
Como regla general, se escribe coma preceptiva antes de las conjunciones adversativas simples pero, mas, aunque, sino: Le regalé unas rosas, pero las tiró a la basura. Cantaría, mas tengo faringitis. Respondí el examen, aunque no tan bien como esperaba. No es el estómago, sino el hígado lo que tiene inflamado.
Si bien la yuxtaposición es muy poco común en el caso de la coordinación adversativa, se dan algunos casos en los que se suprime la conjunción sino y se reformula la oración trasladando el elemento con valor negativo (subrayado) al segundo componente, de modo que se preserve el valor contrastivo entre ambos elementos: Ella no es una ladrona, sino una persona decente. → Ella es una persona decente, no una ladrona.
Cabe señalar que cuando la conjunción pero coordina dos adjetivos o adverbios, es aconsejable suprimir la coma antes de aquella: El examen estuvo difícil pero superable. Me habló con un tono dulce pero asertivo. Ella escribe rápido pero legible. Cuando la coordinación adversativa de adjetivos (subrayados) precede al sustantivo modificado (doble subrayado), es aún más recomendable la supresión de la coma: La dura pero edificante experiencia del fracaso a menudo nos hace madurar. Cuando se coordinan dos adverbios terminados en -mente, el sufijo solo se añade al segundo adverbio coordinado: Estrechó firme pero cuidadosamente su mano.
Cuando la conjunción pero se halle entre dos adverbios muy (generalmente, construcciones enfáticas), no irá precedida de coma: Llegó a la fiesta muy pero muy contento. Te diré algo muy pero muy loco. De igual manera, en construcciones enfáticas del tipo «pero que muy», la coma se suprime si el primer elemento clave del énfasis (subrayado) es tácito: La partida de ajedrez estuvo difícil, pero que muy difícil. → La partida de ajedrez estuvo pero que muy difícil.
Por su parte, la conjunción sino carecerá de coma precedente cuando tenga valor exclusivo, y no contrastivo o sustitutivo, en cuyo caso podría reemplazarse por la expresión más que (subrayada): Nadie sino ella podía tranquilizarla. → Nadie más que ella podía tranquilizarla. No podemos hacer otra cosa sino rezar para que mejore → No podemos hacer otra cosa más que rezar para que mejore.
En términos generales, no se escribe coma después de las conjunciones adversativas simples, salvo que estén seguidas de un elemento periférico, tales como un inciso explicativo, un vocativo o una interjección (subrayados): Me caí, pero, a pesar del golpe, me siento bien. Cité al cliente a las 9:00 a. m., aunque, para ser franco, no creo que venga. No es el auto, sino, como dije, el conductor. Ya le dejé el mensaje, pero, Antonio, quizás ella no lo lea viendo que he sido yo quien lo manda. Fui, pero, ¡coño!, me echó a la calle.
Valga añadir que cuando la conjunción pero va seguida de interrogación o exclamación, no se escribe coma entre ambas —a pesar de la pausa hecha en la cadena hablada—, pues la interrogación es el término sintáctico de la conjunción, y no debe romperse la unidad del grupo sintáctico que conforman ambas: Pero ¿qué dices, madre? Pero ¿será que se resintió con nosotros? Pero ¡que coraje el suyo!
En conclusión, el uso de la coma tanto en los elementos yuxtapuestos como en los coordinados copulativa, disyuntiva y adversativamente es compleja y diversa. Depende de múltiples valores de orden sintáctico y semántico, pero en todos los casos atiende al principio rector de toda la puntuación: la unidad y correspondencia entre los grupos sintácticos, sean estos oracionales o no. En el uso de la coma como delimitadora sintáctica, por tanto, hay que poner especial cuidado en no romper dicha unidad sintáctica.
© Jerónimo Alayón y El Nacional. https://bit.ly/3KcYCYv
CITA CHICAGO:
Alayón, Jerónimo. «La coma y sus usos (parte III)». El Nacional. 11 de julio de 2025. https://is.gd/OHdWRl
CITA APA:
Alayón, J. (2025, 11 de julio). La coma y sus usos (parte III). El Nacional. https://is.gd/OHdWRl