Nessun dorma
Nessun dorma es un himno al amor, a la vida, al heroísmo y a la poesía. La princesa Turandot… representa la vida en su dimensión cruelmente retadora.
Nessun dorma es un himno al amor, a la vida, al heroísmo y a la poesía. La princesa Turandot… representa la vida en su dimensión cruelmente retadora.
Ya sabemos que la construcción de un pensamiento coherente y con el ancla a cierta profundidad no es tarea fácil, pero es uno de los pocos modos de responder a la liquidez de la modernidad que nos tocó vivir.
Aquella expresión, dicha en un aula de la Universidad de Salamanca en el último tercio del siglo XVI, tendrá vigencia cada vez que la estrechez de criterio se imponga y sea superada finalmente por la inteligencia.
Finalmente, y este creo que es el sentido profundo de Llull, el conocimiento solo queda justificado por el otro a quien lo comunico. Así que hay en el afato un fin último que es filantrópico en sí mismo: el hacernos. Cuando me preocupo por entender el mundo y explicarlo a otros, ya estoy cambiando el mundo. Hablar es modificar el mundo.
Esto es lo que hacen dos amigos que mantienen una conversación longeva: desocultan la verdad, se rebelan sistemáticamente contra el encubrimiento, la simulación y el disimulo.
Creo que hemos sobrevalorado académicamente la inteligencia en desmedro de la voluntad. La primera nos muestra hacia dónde debemos ir, en tanto que la segunda nos enrumba en dicha dirección, solo que, en la educación, el destino ya ha sido fijado por el profesor, con lo cual, en términos prácticos, apenas resta dirigirse hacia él.
Con demasiada frecuencia idealizamos Occidente. Los varios occidentes que cohabitan en él ya estaban allí, solo que queríamos creer que eran una sola cosa, uniforme y sólidamente constituida. Me parece, sin embargo, que es mucho más enriquecedor contemplar la posibilidad de un Occidente fragmentario, plural y diverso.
Quien busca saber también pretende ser otro. En esto radica el principio de la trascendencia. Hay una trascendencia gnoseológica en las cosas cuando son conocidas por nosotros, pero hay una trascendencia ontológica en nosotros cuando, conociéndolas, develamos su ser en el mundo.